Jade

El jade es una piedra preciosa cuyo nombre proviene de la palabra “ijada” que significa riñones. Se utilizó en Centroamérica para curar el dolor de riñón. Los precolombinos valoraban más el jade que el oro. Los maoríes tallaban amuletos y adornos en esta roca dura y de grano fino. Esta gema ha sido extraída desde hace más de 200 años, pero fue en China donde más se valoró, formando parte de sus cultos religiosos. Además, un símbolo de distinción en la sociedad china. Pero en 1863, el francés Damour demostró que detrás de esa dura piedra había dos minerales: la jadeíta y la nefrita.

Variedades de jade

Jadeíta:

La jadeíta es muy dura debido a su estructura de pequeños granos y fibras y puede presentarse en una amplia variedad de colores que tienden a ser pasteles y moteados. El blanco es la variedad de color más común y el verde jade imperial es el más buscado.

Jade imperial:

Es la variedad más buscada y venerada en China. Su intenso verde esmeralda la convierte en una joya de gran fuerza y ​​brillo. Su uso en joyería en China está muy extendido y se realizan esculturas de dragones y diversos elementos de la cultura asiática. Históricamente estuvo ubicado en Guatemala, pero hoy los principales yacimientos se encuentran en Myanmar.

Jade:

La estructura cristalina de la nefrita es muy fuerte, lo que significa que se ha utilizado para armas y herramientas como puntas de flecha. Los colores suelen estar en bandas o parches, siendo el verde espinaca el más común. Es más abundante que la jadeíta y menos codiciada. Hay varios países donde podemos encontrar nefritis como Australia, Brasil, Canadá, Estados Unidos…

Uso en joyería

El jade se utiliza en joyería en forma de cabujones y también para realizar esculturas, generalmente con motivos orientales, muchos diseñadores como Fabergé utilizaron el jade en sus joyas y actualmente grandes diseñadores chinos realizan piezas espectaculares con esta gema.

GEMAS